Análisis Digital. 24 de marzo de 2013
En el marco de la celebración, el 22 de marzo, del Día Mundial del Agua, Cáritas Española pone el acento en la necesidad de multiplicar los esfuerzos en el ámbito de la acción humanitaria para lograr que el acceso y uso del líquido elemento se convierta en un eje estratégico a la hora de impulsar un desarrollo verdaderamente sostenible. 
De hecho, el Objetivo 7 de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), centrado en garantizar la sostenibilidad del medio ambiente, se plantea como horizonte para 2015 reducir a la mitad la proporción de personas que no tienen acceso a agua potable. Sin embargo, 8 de cada 10 personas siguen obteniendo agua de fuentes contaminadas en muchas áreas rurales de los países en vías de desarrollo. Todo indica que cumplir con el objetivo de saneamiento marcado va a quedar fuera de la agenda marcada por Naciones Unidas, si se tiene en cuenta que al menos para la mitad de la población que en las regiones en vías de desarrollo carecen todavía de sistemas de saneamiento.
En uno de los capítulos del Informe FOESSA 2013, presentado el pasado 20 de marzo en Madrid bajo el título “Desigualdad y derechos sociales. Análisis y perspectivas” y en el que se abordan de manera específica los ODM y la agenda de desarrollo post 2015, se constata cómo, cuando faltan dos años para que expire la fecha de cumplimiento fijada, todavía hay algunos Objetivos, como es el acceso a fuentes de agua mejorada y segura, que experimentan fuertes demoras.
A pesar de estos retrasos, la red Cáritas sigue trabajando de manera muy activa tanto en el ámbito de la incidencia pública a través de las distintas Cáritas nacionales en todo el mundo como en el terreno del desarrollo en las regiones más vulnerables para avanzar en la búsqueda de soluciones al grave problema del acceso al agua potable.
La gestión del agua es para Cáritas un capítulo estratégico tanto a la hora de desarrollar la respuesta logística a las emergencias y crisis alimentarias –tal han sido los casos más recientes del Sahel, el Cuerno de África, Haití o Darfur, por ejemplo, donde el suministro de agua es vital a la hora de garantizar la supervivencia de millones de damnificados— como cuando se trata de impulsar proyectos sostenibles de desarrollo a medio y largo plazo, sobre todo en ámbito de la agricultura, la seguridad alimentaria y la salud de las comunidades con menos recursos.
Como ejemplo de ese trabajo, se recogen a continuación algunas de las acciones significativas que están siendo apoyadas por Cáritas Española en África, dentro de un marco de trabajo de cooperación fraterna con la Cáritas y las Iglesias locales.
En los últimos dos años, Burkina Faso, en plena región del Sahel, una zona especialmente expuesta a un régimen muy irregular de lluvias estacionales, viene siendo uno de los países prioritarios de la acción exterior de Cáritas Española. Allí, de la mano de la Cáritas local (OCADES), lleva a cabo diversos proyectos orientados a la mejora del acceso al agua potable y de los sistemas de saneamiento.
Las regiones de Tongomayel, Kaya, Ouagadougou, Koupela y Manga son los escenarios donde se centra este apoyo de Cáritas Española, que desde 2011 ha invertido un total de 418.000 euros en la financiación de tres proyectos de esta naturaleza en la zona, para una población estimada de beneficiarios de 115.000 personas.
En las intervenciones que se llevan a cabo no sólo se contempla la perforación de pozos y la construcción de infraestructuras de saneamiento, sino también la formación y creación de comités locales de gestión de los puntos de suministros de agua, junto a campañas de promoción de hábitos y reglas básicas de higiene por parte de las comunidades locales.
Los distritos Sur y Este de la región de Wajir, en Kenia, es otro de los lugares donde Cáritas Española está dando prioridad a su acción humanitaria en el capítulo del agua. Desde febrero del año pasado, se viene ejecutando, en estrecha colaboración con la Cáritas local, un macroproyecto de mejora del acceso al agua, al saneamiento y a una adecuada nutrición para 15.000 personas en esos distritos.
Se trata de una intervención a 18 meses vista a la que Cáritas Española aporta 326.500 euros y que se enmarca en una actuación de emergencia del conjunto de la red internacional de Cáritas orientada a la rehabilitación de 13 comunidades del sur y este de Wajir tras la sequía sufrida a finales de 2011 en toda la región del Cuerno de África.
Junto a la puesta en marcha de planes de distribución de complementos nutricionales para niños menores de 5 años y familias vulnerables, las actividades incluidas en el proyecto incluyen la mejora y rehabilitación de los sistemas de acceso al agua potable (pozos, embalses y canalizaciones), así como la creación de infraestructuras de saneamiento (letrinas) y la realización, en colaboración las instituciones locales, de programas de formación de las comunidades rurales en técnicas de prevención de desastres naturales y sistemas de alerta temprana.
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